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| By Hollem, Howard R, via Wikimedia Commons |
Esta magnífica, transparente y poderosa frase, la pueden ustedes encontrar en el Real Decreto-ley 11/2013, de 2 de agosto, para la "protección" de los trabajadores a tiempo parcial y otras medidas urgentes en el orden económico y social.
Se podría pensar en la aplicación de este decreto ley, cuando las causas económicas pudieran calificarse de desastrosas, o en el caso de un cambio drástico de la técnica, o que la organización requiera un cambio brutal o que la producción no tuviera compradores.
En casos de extrema necesidad se puede entender que excepcionalmente el empresario pueda tomar medidas excepcionales para la supervivencia de la empresa.
Pero el gobierno de la nación, del partido popular puntualizo, aunque los "apretones" laborales y pérdida de derechos comenzaron con los socialistas en el gobierno, y los populares vienen a corroborar ser un partido amigo íntimo de la legislación "manu militari", es decir mediante decreto ley, no contempla esta situación extrema económica, técnica, organizativa o de producción, le basta algo mucho más sencillo, como la "existencia de pérdidas actuales o previstas", también es válido que "durante dos trimestres consecutivos el nivel de ingresos ordinarios o ventas es inferior a los ingresos o las ventas del mismo trimestre del año anterior"
La redacción no puede ser más beneficiosa para el empresario, basta con que prevea tener pérdidas económicas, o que simplemente los ingresos o las ventas sean menores que en otros trimestres, sin determinar en que cuantía, por lo que prever una disminución de un miserable 1 por ciento en las ventas o en los ingresos, al calor de este decreto ley, el empresario podría suspender el contrato de trabajo.
En resumen, cuando el empresario, sea un piernas, sus presupuestos se hayan realizado con los pies, sea un mal gestor, o sencillamente dilapide sus ingresos y genere pérdidas, en ese caso, vienen el gobierno en su ayuda y le dice, no te preocupes, si no has sabido gestionar, si tienes un equipo de dirección desastroso, si tus planes de futuro no valen ni el papel en el que están escritos, yo, gobierno de la nación, te permito que sin otra justificación que las pérdidas que tu inutilidad han provocado, puedas dejar en suspenso los contratos de trabajo de tus empleados, y para que no resulte la cosa demasiado descarada, durante el tiempo de suspensión, tus empleados tendrán derecho a la prestación por desempleo, o lo que es lo mismo, los Presupuestos Generales del Estado, como si fuera el Séptimo de Caballeria americano, vendrá en tu ayuda, y con el dinero de todos, te sacaremos del atolladero.
Desde luego que el gobierno popular está aprovechando la crisis para ajustar ideológicamente el sistema, apretar las tuercas que se encontraban más flojas y destrozar los derechos de los trabajadores. Este camino no hará al sistema económico más eficiente pero incrementará la vulnerabilidad de los trabajadores y permitirá a los empresarios más inútiles sobrevivir a costa nuevamente del erario público.
Conforme avanza la legislatura popular, se manifiesta más claramente la ideología que soporta sus actuaciones, creo que es muy sencilla de explicar, liberalismo a ultranza con soporte público y desaparición de derechos ciudadanos.
Recomiendo que si se encuentra de frente con la suspensión de su contrato de trabajo, reclame ante la jurisdicción social, si la suspensión no se ha argumentado adecuadamente, la sentencia declarará la inmediata reanudación del contrato de trabajo y condenará al empresario a pagar los salarios dejados de percibir.
Con estas medidas nos vamos acercando peligrosamente al despido del título, las reformas, que más bien había de calificar de desintegración del estado del bienestar y de los derechos ciudadanos, acabarán con un mercado laboral en el que los contratadores tendrán barra libre y los contratados tendrán cuerda floja. Lo cual habrá que revertir en cuanto los populares salgan del gobierno.
Medidas urgentes
- Real Decreto-ley 11/2013, de 2 de agosto, para la protección de los trabajadores a tiempo parcial y otras medidas urgentes en el orden económico y social.
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